En un negocio, la primera impresión es la que cuenta, y eso incluye la dirección comercial, si el teléfono es contestado adecuadamente y hasta el lugar que se escoge para reunirse con potenciales inversionistas o clientes, asegura la analista internacional Mónica Cerda.
Los propietarios de pequeñas empresas lo saben, pero su dilema es qué hacer al respecto. Una oficina que impresione y personas que contesten las llamadas telefónicas y sepan atender a los visitantes pueden demandar una porción considerable de su presupuesto. Entonces, ¿cómo garantizar que las primeras impresiones sean positivas sin verse agobiado por estos costos operativos?
Para muchas empresas, la respuesta está en los entornos virtuales, con los que se puede proyectar la presencia de un negocio más estructurado, a un costo mucho menor que el que costaría alquilar una oficina.
RAZÓN DE COSTOS. La idea es que por un costo mensual se pueda disponer de una dirección comercial profesional, un número de teléfono exclusivo contestado por una recepcionista local y la administración de un correo.
Una rápida búsqueda en Internet puede darle una idea de los costos que significa esta herramienta. Estos alquileres ofrecen, también, espacios físicos para cuando necesite celebrar una reunión en algún complejo empresarial de renombre. Indague por referencias antes de elegir uno.
Adaptarse al cambio puede tomar solo unos minutos, asegura Mónica Cerda, pero recomienda evaluar los pro y los contra antes de abrir una ventana más amplia de negocios.
Este paso puede significar evaluar si es verdaderamente importante tener una dirección comercial de prestigio en un centro internacional de negocios o si se prefiere algo más cercano a su hogar para que pueda usar de forma fácil las áreas de trabajo, las salas de reuniones y los servicios de videoconferencia.
Las alternativas pueden ser rentables si se toman las decisiones acertadas, porque la forma de hacer negocios desde el garage de la casa va quedando en el olvido.
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