Japón mostró hoy su satisfacción por el plan de Washington de eximirle de las sanciones que aplicará a partir de julio a los países que compren petróleo a Irán e indicó que no descarta recortar aún más sus importaciones de crudo a esa nación.
El ministro de Finanzas, Jun Azumi, agradeció que Estados Unidos haya tenido en cuenta los recortes ya efectuados por Tokio sobre las importaciones iraníes en los últimos años a la hora de excluir de las sanciones a las instituciones financieras japonesas que hagan negocios con el Banco Central de Irán.
En declaraciones recogidas por la agencia Kyodo, Azumi aseguró que en la decisión de Washington ha pesado también la posibilidad de que el Gobierno nipón reduzca aún más su dependencia del petróleo iraní.
"Creo que vamos encaminados a recortar aún más nuestras importaciones de petróleo (de Irán)", afirmó.
La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, anunció ayer que Japón y diez países de la Unión Europea (UE) quedarán exentos de las penalizaciones estipuladas dentro la ley aprobada por Washington el pasado 31 de diciembre para sancionar a Teherán por su programa nuclear.
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